Manuela narra

TODA OPINIÓN CUENTA: MIS NECESIDADES CUENTAN

Derecho positivo real , satisfacer mis deseos basados en luchas y relaciones.

Quiero mi derecho interno, junto con el externo que me limita, que me hacer vivir con las necesidades de la convivencia con mi marido, el vínculo con Juan, los hábitos de muchos años juntos.

Nací con una voluntad rebelde, pero he tratado de adecuarme a mi educación, la familia, cuidar de esa familia, y quizá aguantar estoicamente la opinión pública.

Me levanto, estiro las piernas, y con los ojos clavados en el techo busco las reglas para determinar mi conducta, para dominar ese mal cuerpo que respira dentro de mi, tengo que encontrar el concepto intelectual, la regla, la solución.

Desconfío de mi entendimiento, tengo que encontrar un método de vida, un argumento que me lleve al diálogo con mi compañero durante tantos años.

En el pasillo, encuentro a Juan, ya viene de desayunar, regresa por pasillos, desnudándose despacio, sin prisas, sin ilusiones, sin problemas.

–Hay que pasar el aspirador–digo–insinúo.

–Qué maniosa de la limpieza, exclama, grita.

–Me gustaría que me hicieras el amor.

–Qué maniosa de las relaciones, si los electrones se «excitan» fastidian el calor.

Una vida tranquila, con desayuno, comida y cena, una bonita casa, una salud razonable…qué más quieres!!!

–Si, debo ser egoísta…si tengo una misión como mujer, madre, hermana, tía sobrina, amiga, suegra…cabe aquí la libertad individual?, pero soy tonta, si estoy esperando que Juan me quiera, me haga caso, ese es un derecho privado?

Voy a comprar, y me da un ramalazo de ilusión y le compro ropa moderna a Juan, que camisa más bonita, le sienta perfecta,`pero él no la quiere, no es su estilo, y lo tiene claro.

La técnica nos está desarrollando la vida, y los años nos desarrolla el cerebro?, entonces por eso lo tengo tan difícil, si tengo más neuronas que estrellas en la galaxia, me soluciona entonces …no puedo entenderlo todo?

Tengo juicio, y éste me llevará a encontrar las reglas de convivencia, pero encontrar un cobijo protector y cariñoso, igual es la cuadratura del círculo. Y puede que no sean reglas estáticas, fijas, la vida es un juego cambiante, lo dijo Voltaire.

Bueno, he dicho algo, sin juicios, forma parte de mi interior, y es bueno que me exprese, que Juan me interprete, pero creo que hay algo más grande. que me interprete yo.

Habla como persona, como esposa, con criterios propios cargados de pasado, pero no he captado todavía, si busca una coordinación de vida con Juan, o su propio desarrollo. Veremos si esa convivencia es recuperable.

mediadora

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